Monday, August 11, 2008

Tales calculated to drive you MAD

1. En estos días, me publicaron en Milenio un texto sobre Mort Drucker, genial artista emblemático de la revista MAD, sobre todo de la década de los sesenta para acá. Lo pueden leer acá.



Actualmente estoy preparando un texto sobre Basil Wolverton, y espero lograr colar unos cuantos perfiles sobre artistas de la MAD en el periódico, si dios proveé.
Lo que sigue a continuación lo posteé previamente en mi blog de MySpace hace algún tiempo ya.

Estos fueron mis libros de texto durante la secundaria. Aprendí más sobre cultura pop, cultura basura, historia, música, televisión e inglés que en cualquiera de mis clases en la escuela. Le debo más a la MAD que a muchos libros y maestros aburridos que tuve.


Cada mes corría al Sanborns de Camarones o al de Lindavista (que eran los que quedaban más cerca de mi casa), y me compraba mi ejemplar y a veces también uno de lo tomos recopilatorios que se llamaban MAD Super Specials. Una vez hasta me gané una suscripción en los sorteos que hacían por medio de los códigos de barras de la revista, solo que me dí cuenta el día que expiraba el chance de reclamar el premio. Shame on me.

También por esos días es que se pusieron de moda las trading cards. Yo me hice de mi colección de Garbage Pail Kids en ese tiempo, pero también junté toda la colección de MAD, que traía portadas al frente, y gags, fold-ins y tiras del otro lado. Mis amigos me miraban como si fuera un freak -y si lo soy- por coleccionar eso. Ellos preferían las tarjetas de futbol americano o de chicas en bikini. Yo no. El americano no lo entiendo (básicamente se trata de güeyes que corren y se caen, corren y se caen; una y otra y otra vez, ¿no?), y las mujeres en bikini me dan hueva (en todo caso las prefiero desnudas, o con ropa sexy, los bikinis son trashy).

Como todo misfit, encontré más en los dibujos de esos artistas que se convirtieron en mis gurús: Jack Davis, Al Jaffee, Mort Drucker, Sam Viviano, James Warhola (sí, el sobrino de aquel otro Warhola), Tom Cheney, Rick Tulka, George Woodbridge, John Caldwell, Tom Bunk, Dave Berg, Paul Peter Porges, Greg Theakston, Bob Clarke, Paul Coker, Duck Ewing y, naturalmente, Sergio Aragonés -quien me dio su autógrafo en la 1er Conque, por allí lo debo tener.

Cada mes me chutaba de punta a punta mis ejemplares de MAD, los leía, los releía, los traducía (así aprendí gran porcentaje de lo que sé del idioma), copiaba los dibujos (así aprendí buena parte de lo que sé sobre dibujo y cartooning), y me reía con el humor característico de la revista. Hay quien dice que MAD no sobrevivió a los años 80, pero yo creo que hasta mediados de los 90 siguió siendo muy buena, a pesar de no estar ya en la tradición de la vieja MAD de Harvey Kurtzman et al., y más bien la edición actual, esa sí es verdaderamente mala. MAD sobrevivió por décadas sin necesidad de anunciantes. Ahora está llena de anuncios, la edita DC -¡que no mamen!- y hasta hay una edición para niños... No comments.

Las ediciones mexicanas siempre han sido malas, sobre todo la que hacía Sixto Valencia, el dibujante de Memín Pingüín. Yo estaba tan encabronado con la chafez de esa edición que le mandé una carta reclamando punto por punto la basura que estaba haciendo con una revista tan emblemática. Me la publicó y me contestó con comentarios "chistosos", que más bien subrayaban que el viejo no era apto para hacer de la MAD en México una revista respetable.

Actualmente hay una edición nacional más, que, muy a pesar de algunos de los buenos colaboradores que tiene, sigue siendo una publicación muy menor, comparada con la original MAD. No es injusto compararla, pues son sus editores quienes han decidido navegar bajo el estandarte de MAD. Es una revista chistosita, que con otro nombre tendría más sentido. El apelativo MAD le queda grande. En fin.

Bueno, pues, leí muchísimas MAD en mi adolescencia. Pueden hacer conjeturas.



Hasta aquí lo que escribí hace ya un par de años.

Bueno, resulta que me acaban de publicar mi primer feature en la MAD México.

Sí, ya sé que dije lo que dije. Pero compréndanme, estaba chavo.

Ahora, a explicarme: hojeando la revista, creo que muchos de sus colaboradores no tienen que ver con la tradición de MAD. Pero lo mismo sucede con la edición gringa. Es como el Saturday Night Live: hay a quienes nos gusta más cuando salían Phil Hartman, Chevy Chase, John Belushi o Dana Carvey. La versión actual no nos divierte. (Sí, ya sé: es síntoma de vejez... pero, ¿acaso mantenerse joven es una virtud?)

La primer vez que ví esta versión de MAD México me sacó de onda lo que me saca de onda en muchas otras publicaciones: aquellos ilustradores que han copiado -y no lo pueden ocultar o negar- el estilo Cartoon Network de las Powerpuff Girls. Sin estilo o discurso propios. Y sin ironía.

Entré a MAD porque Rodrigo Fuzoo Ponce me recomendó contactarlos y tratar de publicar algo de cómic, ya que en la revista dan espacios amplios para ello. Trabajé en esta página:



...y me la publicaron inmediatamente. No sé si YO tenga el espíritu de la MAD que me gusta, pero sí traté de hacer una especie de artículo ilustrado con chistes gráficos. Por lo menos, es algo que aprendí a hacer leyendo MAD.
Sigo teniendo mi opinión de la revista, por ejemplo, que Ricardo Plata hacía cosas muy divertidas en Video Risa, pero que pertenece al pasado. No voy a decir más porque cuando empiezo de hocicón, resulta que el aludido me está leyendo. Y sinceramente agradezco mucho tener un espacio tan generoso en la MAD. Sea lo que sea, y aunque sea en la edición nacional, saberme publicado en MAD me llena de un puto orgullo de aquellos...

...y esto me lleva a comentar mis consideraciones sobre la ilustración. Pero luego será.

Thursday, August 07, 2008

Pero antes...

...un anuncio de nuestro patrocinador:


En la nueva edición de Replicante periodistas y académicos analizan el papel de los medios en la sociedad

Ya está circulando el número 16 de la revista trimestral Replicante, dedicada a los medios y la democracia, una edición que puede ser interesante para estudiantes, periodistas y en general para todos aquellos que quieran comprender los diversos aspectos de los medios en un mundo cambiante y dividido aún entre democracias tambaleantes y regímenes totalitarios.

En la edición varios analistas, periodistas y escritores bordan en torno a diferentes aspectos de las intrincadas relaciones de los medios con el poder y otros sectores de la sociedad. El antropólogo Roger Bartra describe en su ensayo “La vida en la calle” a las calles como medios públicos de comunicación. El politólogo Héctor Villarreal desmonta “Las falacias de los apocalípticos” e ironiza sobre “Tres revolucionarios de los medios”. El historiador Ariel Ruiz Mondragón entrevista a Francisco Vidal Bonifaz sobre “El lado oscuro de los medios” y a Heriberto Yépez sobre su reciente libro Contra la tele-visión. Por su parte, Naief Yehya cuestiona el papel de varios medios estadounidenses y su complicidad con la guerra del presidente Bush contra Irak.

El futuro de la prensa impresa es materia de reflexión de Raúl Olvera Mijares y de Jesús Manuel Lomelí, en tanto que Alberto Sánchez Allred especula alrededor de los nuevos medios digitales. Sobre la libertad de expresión en México escribe Juan Carlos Núñez, y la contrarreforma electoral es discutida por Luis González de Alba.

Adriana Díaz Enciso, Gonzalo Soltero, Eve Gil, y Carlos Enrique Orozco, entre otros especialistas, abordan temas tan diversos pero al mismo tiempo tan entreverados como el fenómeno del “chayote”, la rendición de cuentas de los medios de comunicación, los observatorios de medios, la saturación informativa, los reality shows, análisis y comentarios de programas televisivos y radiofónicos, los medios digitales, la radio por internet, la hostilidad contra periodistas independientes, la “nueva” imagen de la China olímpica, el imperio mediático de Berlusconi en Italia y notas sobre radios comunitarias en Estados Unidos.

En la sección de Apuntes y crónicas destaca el ensayo crítico de Adrián Curiel Rivera acerca de La llegada de los bárbaros, obra enciclopédica sobre los escritores del boom latinoamericano. Además, crónicas sobre la noche en Buenos Aires, el Tíbet y la opresión china, la colaboración entre Enrique Vila-Matas y Sophie Calle; la violencia, las drogas y la muerte en Tijuana y, entre otros textos, un ensayo sobre Mayhem y los veinte años del black metal.

En Réplica a la política hay un par de textos sobre la llamada “monsimanía”, una crítica al candidato Barack Obama y sus amigos ex terroristas, un análisis del libro de José Antonio Crespo 2006. Hablan las actas, y un manifiesto de Andrés Lajous sobre la democracia social posible.

Como siempre, en la sección de Noticias y reseñas, la crítica de la cultura en sus diversas manifestaciones: libros, cine, música, televisión, arte y literatura gráfica. Además, en la sección Replicante Plus de www.revistareplicante.com pueden leerse textos no incluidos en la edición impresa.

PENSAMIENTO Y REFLEXIÓN

La vida en la calle, Roger Bartra

Las falacias de los apocalípticos, Héctor Villarreal

La cátedra Aristegui, Rogelio Villarreal

El lado oscuro de los medios, Francisco Vidal Bonifaz; Repensar la tele-visión, Heriberto Yépez, entrevistas de Ariel Ruiz Mondragón

El futuro de los periódicos, Raúl Olvera Mijares

La muerte de los diarios, Jesús Manuel Lomelí

Viviendo con los nuevos medios, Alberto Sánchez Allred

La libertad de expresión en México, Juan Carlos Núñez Bustillos

La contrarreforma electoral y la libertad de expresión, Luis González de Alba

Tres revolucionarios de los medios, Héctor Villarreal

Periodismo en venta: un acercamiento al chayote, Salvador García

El Sendero del Peje y la involución del periodismo, Jesús A. Castañeda

El dilema de la verdad en la contrainformación, Ricardo García López

¿Quién vigila al vigilante? La rendición de cuentas de los medios de comunicación, Carlos Enrique Orozco

Radio Tierra y Libertad, Raúl Silva

“As the media watch the world we watch the media”. Apuntes y reflexiones sobre los observatorios de medios, Juan Larrosa

E-lecciones, Gonzalo Soltero

¿YouTube mató a MTV?, Iván de la Torre

La nota que derramó el caso: periodismo y prestidigitación, Malú Huacuja del Toro

Ciencia ¿en los medios?, Durruty Jesús de Alba Martínez

Éste es otro artículo sobre saturación informativa, Paco Inclán

Los analistas televisivos y la administración de las percepciones, Naief Yehya

Asesinatos en La voz que rompe el silencio, Raúl Silva

China reinventada, Eve Gil

Odios religiosos y misóginos, Raúl Olvera Mijares

Berlusconi, el dueño de los medios italianos, Alberto Spiller

De Geraldo a Laura Bozzo. Nostalgia del prestidigitador, Noé Morales Muñoz

El prisionero. Más que un número, Adriana Díaz Enciso

Padre de familia: la pura irreverencia, Joaquín Peón Íñiguez

El Muñecón, un dandy de la radio, Lilián Solórzano

Radio comunitaria en Estados Unidos. Una visión desde Radio Bilingüe, Raúl Silva

Crónicas de la radio por internet. Radio Bordes, Phil Schaap y la BBC, Luis Barbosa

APUNTES Y CRÓNICAS

El humo sobre Buenos Aires, Jesús Ernesto Parra

La historia de Agi en el Tíbet, Tayde Bautista

Los bárbaros revisitados, Adrián Curiel Rivera

La extravagante e interminable persecución azarosa-objetiva que me han propinado Vila-Matas y Sophie Calle, Karla Olvera

Los Argumedo, una dinastía dedicada a la fotografía de cine, Elisa Lozano

El norte según Jaime López, Enrique Blanc

Mayhem a dos décadas del nacimiento del black metal, Manuel Guillén

La última sorpresa de Svetlana, Cristian Jara

La Casa Azul y el efervescente sonido pop, Alberto Acuña Navarijo

Turismo cultural: desdén político, Vianett Medina

Tijuana siempre será Tijuana, Diego Enrique Osorno

NOTICIAS Y RESEÑAS

Lectores que escriben v LIBROS Y AUTORES In memoriam Olivier Debroise – 25 infamias culturales, de Carmen García Bermejo – Caballos de fuerza, de Rodrigo Márquez Tizano – El Imperio de la Neomemoria, de Heriberto Yépez – El gran vidrio, de Mario Bellatín – Península, Península, de Hernán Lara Zavala – Malacara, de Guillermo Fadanelli – El mundo de lo apagado, de Carmen Simón, y La reina baila hasta morir, de Eve Gil – Elena Garro a diez años de su muerte – Yo quiero que haya mundo... Elena Garro. 50 años de dramaturgia, de Patricia Rosas Lopátegui – Antología del poema en prosa en México, de Luis Ignacio Helguera – Melodrama, de Luis Zapata, en cinco películas – Gritos en el silencio: niñas y mujeres frente a redes de prostitución, de Elvira Reyes Parra – La pluralidad de los mundos de Lewis, de Jacques Roubaud, y Drivethru, de Ricardo Cazares – La revolución rebelde, de Juan Luis Alonso – Dulce amargo, de Dulce María – Guadalajara 2006, de Salvador Gutiérrez Solís – BUZÓN HACHE Novedades en inglés – TIEMPO FUERA, La tiranía de las tradiciones inventadas – CINE Déficit, de Gael García Bernal – Katyn, de Andrzej Wajda – MÚSICA The Puppini Sisters – Lucky, de Nada Surf – Sunday at Devil Dirt, de Isobell Campbell y Mark Lanegan – ARTE Instrucciones y recetas, de Tania Candiani – LITERATURA GRÁFICA Clyde fans Book, de Seth, Lust, de Ellen Forney, I killed Adolf Hitler, de Jason – FOTOGRAFÍA Monumentos menores, de Sandra Calvo y Pedro Ortiz Antoranz – La revista Galán

RÉPLICA A LA POLÍTICA

Monsimanía: una devoción anacrónica, Héctor Villarreal

Otro regalo para Monsiváis, José Ramón López Rubí Calderón

La democracia social posible: una izquierda “tacuba”, Andrés Lajous

Parcialidad desbordada: las actas de Crespo, Francisco Arvizu Hugues

Barack Obama, el terrorismo estadounidense y las políticas del olvido, Douglas C. Nance

Portada de Paco Estrella. Gráfica de Jorge Alderete, Ivabele Arroyo, Nadia Baram, Juan Bastardo, Peter Beste, Sophie Calle, Miriam Canales, Sergio Garibay, Oliverio Hinojosa, Paula Islas, Guillermo Juárez, David Leeson, Bela Límenes, Marcos López, Pedro Meyer, Ernesto Muñiz, Stig Nygaard, Pelafustán, Jay Puc, Enrique Ramírez, Helena Rey, Tízoc Santibáñez, Tanus, Alberto Tovalín

Replicante está a la venta en todo el país en Sanborns, Gandhi, Fondo de Cultura Económica, Libros y Arte/Educal, Palacio de Hierro y otras librerías y locales cerrados de prestigio.

Friday, August 01, 2008

Nunca creí salir en El Pasón...


...y lo hice con esta imagen apocalíptica:


¿A poco no da miedo? De pelo rizado me parezco a una de mis tías, dammit.

Bueno, la cosa es que este bonito fotorretoque debe ser obra del buen Tacho -no estoy seguro-, y la foto es de Arturo Bermúdez. Sirvió para la nota de Milenio sobre nuestra expo en el MUNAE. La que sigue es la que nos sacaron con mi cámara (alguien le movió algo y muchas de mis fotos salieron borrosas, carajo):



De izquierda a derecha: Richard Sandoval El Muchachón, Román Rivas vestido de rockabilly, Lluvia Sepúlveda, curadora del museo, un güey, Tania Morales, también del museo y Rodrigo Ponce. Abajo: Waldo Matus y Tacho. Kabeza, quien vive en Chihuahua, no pudo llegar para el opening, pero lo hará la próxima semana.

No es la primera vez que me agarran de bajada en el Mileño. Antes salí así:



En la inauguración hablaron Carlos Marín y Jairo Calixto. Hubo varias celebridades de las que luego hablaré por acá.

Jairo y Marín con el director del MUNAE

Para el evento, Jairo se discutió con este textito:



Antes de la inauguración hubo entrevistas de radio, notas en el periódico y toda la cosa. A mí me entrevistaron y la nota en el Milenio decía cosas que yo no dije, como que yo consideraba que los ilustradores de Milenio somos artistas de vanguardia. No maméis.

En todo momento hubo una especie de mini debate entre Román y yo sobre si los que estamos en la expo somos moneros o no. La expo, como alguien recordará, se llama "Estampas del Milenio y Mil Cosas Más". Cuando la gente nos presenta, nos llama caricaturistas y/o moneros. Hay una confusión de términos porque los que formamos parte de la muestra somos heterogéneos tanto en estilos como en técnicas, lo cual cambia mucho las cosas. Pero más adelante escribiré un post sobre este tema y mis consideraciones sobre nuestra profesión y el gremio de la ilustración. También hablaré sobre lo que pasó para poder ver finalmente nuestro trabajo colgado.

Por lo pronto, este fin de semana volveré a ir a ver la expo y fotografiaré las obras para subirlas a este glorioso blog.

y...